05/May/2024
Editoriales

La Doña

Hace ciento ocho años en Álamos, Sonora, nació la más deslumbrante belleza del cine mexicano: María Félix. En su primera película ‘El Peñón de las Ánimas’ enamoró a los mexicanos con su hermoso rostro enmarcado en un sombrero. 

La leyenda de La Doña fue creciendo hasta traspasar la línea del tiempo, pues el resto de su vida y después de muerta, La Doña sigue siendo la gran estrella del cine y del cielo mexicano. 

Por sus venas corría mitad sangre yaqui, por su padre, y mitad española, por sus madre, y fue educada esmeradamente en un convento en Pico Heights California.

Antes de mudarse a Guadalajara, la familia pasaba la vida entre Álamos y El Quiriego, el rancho de los abuelos, en donde María prefería jugar con sus hermanos subiendo a los árboles y montando a caballo y otras cosas que solo hacían los muchachos de la familia, se apartaba de los juegos de niñas que con sus muñecas y comiditas practicaban sus hermanas. 

Ella y su hermano Pablo siempre hicieron equipo, desarrollándose un gran amor fraterno, pero se separaron cuando Pablo ingresó a la escuela militar.

Para María eso fue una pena, misma que se multiplicaría cuando recibió la noticia de que Pablo había muerto en el colegio militar.  

Su belleza fue reconocida por primera vez a los 13 años al ser coronada como reina de belleza de la Universidad.  

Al poco tiempo y para evadir la brutal disciplina de su padre, se casó con Enrique Álvarez, pero la juventud y la inexperiencia de ambos terminó en divorcio; de esta unión María tuvo su único hijo, Enrique Álvarez Félix. 

María se desplazó a la Ciudad de México. Y un día de los años cuarenta, el Ingeniero Fernando Palacios la abordó en la calle de Palma y la convenció de hacer una prueba para el cine, ella no lo tomaba en serio pensando que más bien el Ingeniero Palacios quería tener una aventura con ella pero una vez convencida que no era así, le gustó el reto y aceptó, de allí en adelante todo sería historia y leyenda. 

En su carrera cinematográfica María filmó 47 películas, todas con artistas de gran fama como Pedro Armendáriz, Rossano Brazzi, George Marchall, Yves Montand, Gerard Philipe, Vittorio Gassman, Curt Jurgens, Fernando Rey, Jack Palace, Fernando Fernán Gómez, Jorge Mistral, Arturo de Córdova, Jorge Negrete, Carlos Thompson, Ignacio López Tarso, Emilio Fernández y muchísimos más.   

María se casó cuatro veces: con Enrique Alvarez, con Agustín Lara, con Jorge Negrete y con Alex Berger, al final de su vida vivió con el pintor francés Antoine Tzapoff. Pasaba  seis meses del año en París y los otros seis en México, entre su casa de la Ciudad de México y la de Cuernavaca. 

Recibió homenajes y distinciones y el cariño del pueblo de México. En 1996 Francia la condecoró con la orden de Commandeur dans I´Ordre National des Arts et des Lettres, la más alta distinción que otorga el gobierno de Francia, siendo María la primera mujer en América Latina que la recibe.

El 8 de abril de 2002 (el mero día de su cumpleaños 88), María Félix falleció en su casa de la calle Hegel 610, en Polanco, construida por su ex esposo Berger en 1956.

fue propietaria de la colección de pinturas "Cuando La Danza Se Vuelve Rito, Los Indios de México" pintada por Antoine Tzapoff  que ha recorrieron varios museos de la República Mexicana, en Valencia, España y actualmente en París, Francia en La Casa de la América Latina 

María Félix fue una mujer con pleno control de su vida, nadie la dirigió, ni la utilizó, su fuerza vital la llevó al grado de la adoración del pueblo, no es como otras figuras del cine que son recordadas por algunos de sus personajes que suplantan su personalidad real, sino que siempre fue María Félix.

Su capacidad artística y su belleza todavía no son superadas por ninguna actriz mexicana, mucho menos su fuerte personalidad.