La infraestructura estadounidense se desmorona a su pequeño ritmo, día a día.

 Cuatro días después de que un buque portacontenedores chocara contra uno de los dos muelles del puente Francis Scott Key en la I-695 en Baltimore, cruzando el río Patapsco, colapsando el puente y matando a seis personas (un colapso que podría haberse evitado), una barcaza chocó contra puente en la autopista estadounidense 59 que cruza el río Arkansas el 30 de marzo. El accidente cerró parte del puente durante horas.

 El 1 de abril, un trozo de la pintoresca Ruta Estatal 1, una carretera de norte a sur que corre a lo largo de una carretera elevada a lo largo de la costa del Océano Pacífico, se rompió y cayó por la ladera de la montaña hacia el océano. El tráfico estaba bloqueado; las reparaciones están programadas.