El presidente ruso se reunió ayer con jóvenes empresarios, ingenieros y científicos que asistirán al Foro Económico Internacional de San Petersburgo (SPIEF) de la próxima semana para escuchar sus ideas preparatorias para el foro sobre dónde está Rusia “ahora, dónde estamos”. vamos y lo que tenemos que hacer para asegurar nuestro progreso absoluto e incondicional, para que sea beneficioso para el país y para todos los involucrados en este notable proceso” de transformación y cambio de Rusia.
Putin situó esta tarea dentro de la continua lucha histórica de Rusia por asegurar su soberanía.
En el mundo actual de rápidas “transformaciones geopolíticas, científicas y tecnológicas”, Rusia, o cualquier país que desee ejercer el liderazgo en cualquier área, debe ser soberano, les dijo.
“No hay término medio, ningún estado intermedio: o un país es soberano, o es una colonia, no importa cómo se llamen las colonias… si un país o un grupo de países no es capaz de tomar decisiones soberanas, entonces ya es una colonia hasta cierto punto. Pero una colonia no tiene perspectivas históricas, ninguna posibilidad de supervivencia” en lo que él considera siglos de “dura lucha geopolítica”.
Los líderes occidentales a los que les quede algo de cerebro harían bien en pensar un poco en la discusión de Putin sobre los componentes esenciales de la soberanía: político-militar, económico, técnico y social. Explicó que por soberanía “social” se entiende “la capacidad de la sociedad de unirse para resolver los desafíos nacionales, de respetar la historia, la cultura, la lengua y todas las etnias que comparten un mismo territorio. Esta consolidación de la sociedad es una de las condiciones fundamentales para el crecimiento. Sin consolidación, las cosas se vendrán abajo”.
Estos componentes están interconectados y son de igual importancia, “porque uno no puede existir sin el otro”. No se puede tener seguridad externa sin capacidad tecnológica y soberanía tecnológica, dijo, como se ejemplifica en el desarrollo de armas hipersónicas de Rusia.
Asimismo, ¿cómo podría una sociedad unirse para resolver los desafíos nacionales con “una economía que cojea, estornuda y tose? … Y si no hay consolidación, tampoco habrá nada más”. Asegurar ambos requiere lidiar con "tareas básicas como la demografía, que significa atención médica, medio ambiente, investigación, educación y crianza".
Putin enfatizó la importancia de los valores básicos, de la cultura. Aquí, hizo referencia a una discusión que tuvo con el Patriarca hace algún tiempo sobre la educación, en la que el Patriarca comentó que “aunque la educación era realmente crucial, sin una educación adecuada, no tendríamos éxito en nada, porque se puede enseñar algo a una persona, pero la pregunta es cómo usarán su conocimiento”.
Por lo tanto, “si no confiamos en los valores básicos de las culturas nacionales de los pueblos de Rusia”, dijo Putin, “no consolidaremos nuestra sociedad. Sin consolidación, todo se vendrá abajo. Y el hecho de que tenemos que defendernos y luchar por ello es obvio”.
Fue en ese contexto, entonces, que hizo sus comentarios sobre Pedro el Grande y su Gran Guerra del Norte que tienen a los comentaristas occidentales tan nerviosos. ( http://en.kremlin.ru/events/president/news/68606 )
'¿Cómo se atreve Putin a compararse con Pedro el Grande?'
Los medios occidentales están histéricos ante la comparación indirecta de Vladimir Putin de la operación militar en Ucrania con la Gran Guerra del Norte de 1700-1721 en la que Pedro el Grande conquistó el área donde se encuentra hoy San Petersburgo. En realidad, dijo Putin, esa región había pertenecido a pueblos rusos antes de ser conquistada por Suecia. Peter lo devolvió a Rusia. Ningún país europeo reconoció a San Petersburgo al principio, señaló.
