Abril 15 de 1980: presenta el secretario de programación y presupuesto Miguel de la Madrid Hurtado, durante el gobierno del presidente José López Portillo el primer Plan Global de Desarrollo en el que se integran todos los programas gubernativos, y ordena los programas nacionales, estableciendo metas con fechas fijas, iniciándose así una era de modernidad en el manejo de las finanzas.

  El 20 de marzo anterior el presidente JLP había anunciado que México no sería parte del GATT, continuando con su economía cerrada, de protección a los productos y productores nacionales.

 Sin embargo, el país se preparaba para la competencia internacional mediante el estricto cumplimiento de sus obligaciones tanto de la deuda externa como del comercio.

  El mejor indicador fue que el 27 de mayo siguiente, México y Canadá firmaron en la ciudad de Ottawa un Convenio sobre Cooperación Industrial y Energéticos.

 El elemento de la transformación económica de estos cambios fue que desde el día primero de ese año 1980 se suprimió el Impuesto sobre Ingresos Mercantiles ISIM, para dar paso al Impuesto al Valor Agregado, el IVA, que llegó para quedarse.

  Pero el proceso de descomposición económica y social apenas iniciaba, desembocando en varias crisis cambiarias derivadas del quiebre en los precios internacionales del petróleo, pues la economía nacional estaba súper apalancada en dichos ingresos.

  Un par de años después, Miguel de la Madrid sería presidente de la República y con una gran disciplina pudo controlar el desbocado caballo de la inflación, para mantener la planta productiva trabajando. Claro que después del sismo de septiembre de 1985 se convulsionó no sólo la economía, sino todos los rubros de la vida nacional. Pero esa es… otra historia.