19/May/2024
Editoriales

CRECE ESCÁNDALO DE "LAS 28 PAGINAS DEL CONGRESO" SOBRE EL 11/9 EN EU

Luego del reconocimiento descarado que hizo el director de la CIA John Brennan en la televisión nacional el domingo 1 de mayo, en el sentido de que el Presidente Obama no tiene la menor intención de desclasificar las 28 páginas secretas de la Investigación Conjunta del Congreso sobre las operaciones de inteligencia extranjera en los ataques del 11-S, aparte de su mentirosa interpretación de que las 28 páginas contienen "pistas no comprobadas" que fueron desechadas por la Comisión del 11-S, ha habido una oleada de repudio al encubrimiento continuado del aparato terrorista anglo-saudí­.

El 3 de mayo, Paul Sperry, publicó un artí­culo en el diario New York Post con el encabezado "La clase dirigente miente sobre el Informe 11-S". Sperry no solo ridiculiza las mentiras de Brennan, sino que presenta un documento de la misma CIA fechado el 2 de agosto de 2002, el cual dice que se cita en la primera página del capí­tulo secreto de 28 páginas, y que establece que "hay pruebas incontrovertibles de que hay apoyo a estos terroristas por parte del gobierno saudí­". Es obvio que a Sperry le han filtrado cuando menos partes de las 28 páginas secretas, y en el artí­culo le recuerda a Brennan que él era subdirector de la CIA en el momento en que se realizó ese informe. Sperry también desenmascara a Tom Kean y Lee Hamilton, quienes presidieron conjuntamente la Comisión del 11-S, por dar marcha en su postura anterior de que las 28 páginas y todos los archivos de la Comisión que todaví­a están clasificados como secretos, y ahora sostienen que la Comisión exoneró a los saudí­es y que la liberación de las 28 páginas solo enturbiarí­a las aguas. Sperry recoge en particular una mentira atroz de Brennan y de los comisionados, la mentira de que ni siguiera hubo evidencia en contra del clérigo saudí­ Al-Thumairy, quien viví­a en Los Angeles y tení­a contacto con el agente de la inteligencia saudí­ al-Bayoumi y los dos terroristas que viví­an en San Diego, al-Hazmi y al-Mihdhar.

Dan Christensen, quien tiene una demanda pendiente en contra del FBI para que libere 80,000 páginas de documentos relacionados con la célula de terroristas del 11-S que viví­a en Sarasota, Florida, publicó un artí­culo en su portal electrónico Florida Bulldog el 3 de mayo, donde cita a una entrevista que el condujo el 2 de mayo con el ex director de la CIA —y que fue copresidente de la Investigación Conjunta del Congreso—, Porter Goss, en la cual Goss sigue exigiendo la liberación de las 28 páginas, en marcado contraste con Brennan. El artí­culo de Christensen se titula "Es un asunto de espí­a contra espí­a, pues los directores de la CIA difieren sobre hacer público 28 páginas escondidas del informe sobre el 11-S". En su entrevista con el Bulldog, Goss describe una reunión que sostuvieron él y el senador Bob Graham con el entonces director del FBI, Robert Mueller, quien los sorprendió con la exigencia de que el capí­tulo de las 28 páginas se tení­a que suprimir por completo sin dar ninguna explicación.

Kristen Breitweiser, viuda de una de las ví­ctimas del 11-S, escribió otro artí­culo par el Huffington Post, en donde destroza meticulosamente las declaraciones de Kean y de Hamilton, bajo el encabezado de "Alboroto sobre las 28 páginas: ¿La conexión Saudita-CIA?" y se refiere nada menos que a John Brennan, quien fue jefe de la estación de la CIA en Arabia Saudita, luego de trabajar ahí­ también a principios de su carrera como funcionario de la CIA.