En un país democrático es posible que un novato alcance la cima política y aunque no es muy probable, hemos visto surgir candidaturas de artistas, deportistas, y empresarios que triunfan en una elección por su carisma o popularidad personal.  Recientemente han sucedido algunos casos exitosos como el del jalisciense Pedro Kumamoto que a los 25 años y sin partido político ganó una diputación local; o el de Margarita Arellanes que triunfó en la elección para la alcaldía de Monterrey, teniendo como antecedente sólo haber sido delegada federal; y ahora intentará repetir esa hazaña Mariana Rodríguez, la esposa del gobernador Samuel García, cuyo único antecedente es dirigir el ente llamado Amar a Nuevo León.

De estos tres políticos novatos podemos decir que Kumamoto terminó sumándose al partido oficial MORENA, Arellanes terminó su periodo y no hemos vuelto a saber de ella, y ahora todo indica que Mariana dará la pelea a las otras alternativas electorales. 

Resumiendo, el primero de estos tres noveles políticos sigue en el difícil oficio político, aunque disminuido en su imagen de joven retador del sistema; la segunda, aparentemente se retiró de la política, por lo que será interesante ver cómo sortea Mariana Rodríguez los cuestionamientos de sus adversarios.

Hay cualquier cantidad de anécdotas en este tema de aspirantes a políticos que don Adolfo Ruiz Cortines trató de ubicar, toda vez que él tuvo una amplia carrera en el sector público antes de ser presidente de México. 

Desde el compadre que quería ser alcalde de su pueblo con el único mérito de su amistad con don Adolfo, pasando por aspirantes a formar parte de su gabinete nomás por haber sido sus fieles seguidores por largos años, hasta la solicitud del tamaulipeco Manuel Ravizé sin ningún mérito político en la vida pública.

Después de gestionar ‘N’ veces una audiencia con Ruiz Cortines, durante una gira por Tamaulipas el primer mandatario hubo de atenderlo porque el solicitante era demasiado tenaz:

_De manera que usted quiere ser presidente municipal de Tampico.

_Así es, señor presidente

_Pero, Manuelito, entiendo que usted jamás en su vida ha trabajado.

_Precisamente por eso, señor. ¡Imagínese usted todas las energías que tengo acumuladas!

Ravizé mostró que, a pesar de no tener experiencia política conocía el medio y era dueño de una mente ágil y mucha simpatía. 

Para abreviar solo diré que al paso del tiempo, Manuel Ravizé ahí comenzó su carrera y la terminó siendo gobernador de Tamaulipas, teniendo de secretario general de gobierno al regiomontano y futuro gobernador neoleonés, Pedro Zorrilla Martínez.

Veremos el desempeño de la novel política Mariana Rodríguez como candidata, y lo comentaremos…